Se establecen las diferencias celulares en el cuerpo femenino y masculino
Los biólogos moleculares de los Estados Unidos de América han descubierto que las células madre hematopoyéticas en la médula ósea de mujeres y hombres difieren entre sí en la actividad de los genes que contienen y también en cómo reaccionan a las diferentes hormonas.
Se sabe que los hombres y las mujeres difieren entre sí no solo por los órganos sexuales y las características sexuales secundarias, sino también por el trabajo del organismo en su conjunto. Las diferencias en los conjuntos de hormonas explican la existencia de enfermedades típicamente "femeninas" y "masculinas", así como las características de la psique y la estructura corporal.
Shawn Morrison de la Universidad de Texas y sus colegas han descubierto un ejemplo interesante de tales diferencias al observar cómo funcionan las células madre hematopoyéticas en los organismos de ratones machos y hembras. Inicialmente, no se encontraron diferencias, pero cuando estudiaron cuidadosamente la composición proteica de las células y la actividad de los genes en ellas, encontraron varias diferencias serias en su trabajo. Por lo tanto, las células hematopoyéticas femeninas compartían mucho más activamente que los hombres, y también se convertían en "palanquillas" de eritrocitos con mayor frecuencia. La segunda diferencia: una reacción completamente diferente a algunas moléculas de señalización.
Un aumento en la concentración de este compuesto en las cercanías de las células madre femeninas hizo que se dividieran más rápidamente y con mayor probabilidad se convirtieran en eritrocitos y otras células sanguíneas. Esto no ocurrió al inyectar estrógeno en la médula ósea de los hombres.