Yoga-Ayengar para la mejora de la salud del organismo
Este tipo de yoga se originó en la India. Su popularidad se explica por el hecho de que los ejercicios tienen un efecto beneficioso tanto en el cuerpo como en el alma de una persona. Las clases regulares de yoga-Iyengar permiten fortalecer significativamente la salud, deshacerse de los trastornos mentales y lograr la armonía interna.
Ejercicios complejos
Se recomienda realizar los ejercicios en el orden en que se administran. Su singularidad radica en la accesibilidad. Yoga-Iyengar no tiene restricciones de edad y nivel de aptitud física. Incluso después de haber realizado todos los ejercicios, no se sentirá muy cansado, porque este complejo se basa en la tensión y la relajación alternas.
Antes de una sesión, toma una pose para meditar. Para ello, siéntese en el suelo, mantenga la espalda recta, flexione las piernas en las articulaciones de la rodilla y tire hacia la pelvis (una parada por encima de la otra). Las palmas se levantan y se ponen de rodillas, respira suavemente y con calma. Esta posición permite no solo sentir la pacificación, sino también sintonizar el funcionamiento de todo el complejo.
Ejercicio 1. Tocar las rodillas
1. Siéntate en el piso, flexiona las piernas en las articulaciones de las rodillas y baja las caderas en los talones.
2. Doble, frente toque el piso, las manos se estiren hacia adelante.
3. Relaje los músculos de todo el cuerpo y permanezca en esta posición durante unos minutos. Respire naturalmente, sin tensión.
Ejercicio 2. El reposamanos
1. Acuéstese boca abajo en el piso, con los brazos doblados en los codos y las palmas apoyadas en el suelo cerca del cofre.
2. Con la palma de la mano en reposo, enderece las manos. Inclinándose hacia atrás, estirar la parte superior.
3. Siente cómo se estiran los músculos de la espalda, la respiración es arbitraria.
Ejercicio 3. Curlings
1. Desde la posición final del ejercicio 2 realice un giro lento, mirando por encima del hombro e intentando ver los dos talones.
2. Realice tal torsión 7 veces en cada dirección.
3. Bajar el cuerpo y recuperar la respiración.
Ejercicio 4. Levantando la pelvis
1. Tumbado boca abajo en el suelo, apoye las palmas de las manos en el suelo y levante la pelvis, primero apoyándose en las rodillas y luego enderezando las piernas.
2. Las palmas y los pies deben descansar en el suelo, mientras que las manos y el cuerpo forman una línea recta, las piernas se enderezan.
3. Manténgase en esta posición durante 5 respiraciones completas: exhalaciones.
Ejercicio 5. Saltando
1. Desde la posición final del ejercicio 4 realice un salto fácil a los pinceles. Las piernas se doblan ligeramente en las articulaciones de la rodilla, coloque las manos en una línea con los talones.
2. Lentamente endereza tus piernas y presiona el cuerpo contra tus pies. Si no puede poner el pincel en el suelo, puede tocarlo con la punta de los dedos.
3. Repita el ejercicio 4 veces.
Ejercicio 6. Levantando la pierna con el rizo
1. Siéntate en el piso, endereza tus piernas.
2. Tire de la pierna derecha hacia el abdomen y gírela, y gire la caja hacia la derecha.
3. Realice 5 giros en cada dirección.
Ejercicio 7. Incline el abdomen hacia los muslos
1. Siéntate en el piso, las piernas se enderezan hacia adelante.
2. Realice una lenta pendiente hacia adelante, meta el estómago en las caderas, tire de los cepillos hacia los dedos de los pies.
3. Repita el ejercicio 8 veces.
Ejercicio 8. Desviación del cuerpo
1. Párese derecho, las piernas juntas, los pies paralelos entre sí.
2. Inhale y levante los brazos, eche la cabeza hacia atrás, flexione al máximo el cuerpo desde el cuello hasta los omóplatos.
3. Mantenga esta posición tanto como pueda y realice el movimiento inverso durante la exhalación.
Ejercicio 9. Protrusión del estómago
1. Pon tus pies al ancho de tus hombros y dóblalos ligeramente en tus rodillas.
2. Con las manos, apriete los muslos ligeramente por encima de las rodillas con los dedos hacia adentro.
3. Relaja tu espalda, pon el énfasis en tus manos.
4. En esta posición, jale y protruya el estómago con una amplitud máxima de 10 veces.
Ejercicio 10. Relajando las manos
1. Párese en posición vertical, coloque los pies sobre el ancho de los hombros, los pies son paralelos entre sí, las manos bajan a lo largo del tronco.
2. Inhale y rápidamente inclínese hacia adelante, las manos deben estar libres para colgar.
3. Imagina tomar una barra pesada. Tensando todos los músculos del cuerpo, desenrosque el cuerpo, como si realizara levantando la barra.
4. No doble los brazos en los codos, concéntrese en la extensión de la columna vertebral.
5. Enderece, sostenga por unos segundos en esta posición, luego afloje los dedos y relaje todo el cuerpo.
6. Repita el ejercicio 4 veces.
Ejercicio 11. Plegado de las palmas
1. Póngase de pie, junte los pies, doble las palmas de las manos al nivel del corazón.
2. Inhale lentamente, luego exhale lentamente, mientras jala el estómago, inclinando su cabeza y presionando su barbilla contra su pecho.
3. Sostenga en esta posición, luego relaje los músculos, enderece la cabeza e inhale.
4. Repita el ejercicio 6 veces.